Cuidando cada detalle✨
Para que sientas el amor que siento por mi trabajo.
Todas las joyas son hechas a mano por mi con mucho amor y dedicación. Me esfuerzo en asegurarme de que cada detalle sea perfecto, utilizando hilos de alta calidad de Linhasita y metales duraderos como el acero inoxidable o la plata, para que tus joyas te acompañen toda la vida.
Cada gema que utilizo está seleccionada para ofrecerte la calidad más exclusiva en piedras preciosas, trabajadas a mano por artesanos que tallan gemas. Cada una tiene su propio significado especial, es por ello que cada una tiene su momento. Me guio por la intuición y la sintonía de cada mineral para elaborar los diseños. Esto convierte a mis joyas en piezas únicas, muchas de ellas con gemas que son difíciles de encontrar.
Me importa mucho no solo la calidad de las joyas, sino también cómo se presentan. Preparo todos los pedidos al detalle, cuidadosamente envueltos con todo el amor de mi corazón.
Trabajo con proveedores sostenibles y elijo cuidadosamente quienes extraen gemas de manera responsable. Además, todos mis embalajes son de cartón FSC, porque como marca consciente también hay que ser responsables con el planeta.
El proceso desde que sientes flechazo con tu joya hasta que la recibes en casa lo he trabajado minuciosamente para que tengas la calidad que mereces en todos los sentidos, incluida la atención que recibes.
Si quieres seguir el día a día de mis creaciones, ¡sígueme en redes sociales! @carolamacrame No te arrepentirás. Y si tienes preguntas o deseas un pedido personalizado, no dudes en escribirme. ¡Estaré encantada de ayudarte!
Me llamo Carolina
Pero puedes llamarme Carola
¿Quién soy? Una loca apasionada, movida desde que tengo uso de razón por la creatividad. Podría empezar por la infancia, pero ha sido terrible y no quiero contar penurias, lo que cabe mencionarla pues es el cimiento que me ha formado como persona, y, quizás debido a ciertas carencias, desarrollé a lo largo de mi vida una gran capacidad de amar. También una gran necesidad de expresar mis emociones, ideas y pensamientos. Mi primera pulsera de macramé la tejí a los 8 años de edad y ya por entonces me fascinó, pero si es cierto que como niña que era me fascinaban muchas cosas. La música ha sido y es mi otra gran pasión, y ya en esa edad comencé a componer mis propias canciones.
También, por experiencias y circunstancias a lo largo de mi vida, he creído firmemente en el poder de las energías y la gemoterapia, además de tener la afición de coleccionar todo tipo de minerales, aunque fueran simples guijarros, y a medida que fui creciendo entendía que tanto esas piedras, como cuando agarraba un boli para escribir una canción, era la forma de canalizar todo lo que llevaba dentro, y es ahí donde se hace la magia, donde nace el arte, donde ponemos una parte de nuestra alma representada en una creación.
Tras pasar mi adolescencia, llena de pruebas a superar (como independizarme a los 16 y tomar las riendas de mi propia vida en una época que no tenia los recursos emocionales suficientes, pero me hizo conocerme a mi misma y curtirme antes de tiempo), sabia que me faltaba algo que comprendí a través de trabajo personal, algo que era otro de mis valores: la libertad.
Esos valores han sido las raíces que han hecho posible Carola Macramé
Y mi filosofía es: si ponemos amor en todo lo que hacemos, este se canaliza, y se transmite... por eso pongo todo el amor del mundo en lo que hago, porque el amor es una de las fuentes de magia mas poderosas.
Mis valores: Amor, dedicación y libertad.
Carola Macramé nace como idea de emprendimiento en 2021. Fue un momento revelador, una pausa que me permitió canalizar mi energía creativa y desarrollar una nueva colección de diseños. Aprendí, ensayé y error tras error, fui perfeccionando mis técnicas de forma autodidacta. Con un trabajo estable como cocinera vegana, tomé el valiente paso de poner mi primera exposición en el restaurante en 2022, un hito que me llenó de emoción y esperanza. Finalmente, en 2023, di el salto definitivo hacia la aventura del emprendimiento. Me hice autónoma y compré mi paradita medieval, un espacio que resonaba perfectamente con mi amor por la artesanía y la magia de los mercados medievales.
Hoy, cada nudo que tejo y cada diseño que creo son una manifestación de mis sueños, mi gran deseo de nutrirme, nutrir de amor, y de todas las luchas que he enfrentado. Porque detrás de cada pieza hay una historia, un deseo de conectar con el mundo a través de la belleza del arte y el amor.
Suelo escuchar música celta y de fantasía para crear mis trabajos. Comienzo con el engarce la piedra, y es mientras la engarzo cuando mi imaginación se mezcla con la sintonía y comienza a dar rienda suelta a la creatividad que llevo dentro. El macramé es maravilloso, puedes plasmar cualquier idea nudo a nudo, por lo que para muchos encargos personalizados de macramé que he realizado, me ha bastado con un dibujo de la persona o que me contase al detalle lo que quería que transmitiera su pieza, y los resultados aun me sorprenden incluso a mi.
Carola Macramé ha sido una explosión de emociones bonitas, de esfuerzo y ejemplo de superación. Todo lo que hay detrás es la semilla del fruto que ahora comparto con el mundo, y el comienzo de un proyecto lleno de amor, ilusión y aprendizaje. Me he comprometido conmigo misma para daros lo mejor de mi ser, y para llenar cada rinconcito del planeta con el arte y el cariño que canalizo en mis joyas de macramé.